El término gregüescos
aparece en documentos de 1572. En el siglo XVII
sustituye definitivamente a las calzas de muslos tendidos o calzas largas (prenda esta última que aparece hacia 1590).
Y el calzón, prenda ceñida al muslo, sustituirá hacia 1640 al greguesco.
Y el calzón, prenda ceñida al muslo, sustituirá hacia 1640 al greguesco.
Se cree que pudieron venir de los mercenarios griegos, aunque parecer ser que la
palabra proviene del italiano grechesco, que quiere decir a la griega (¿prenda a la manera griega?).
Fueron más o menos amplios, llegaban hasta las rodillas y se sujetaban con cinta a ellas. Se podían acuchillar. El
resto de las piernas se cubría con medias.
Se hacían con chamelote, terciopelo, raso, damasco, batista, gamuza, burel... Durante el XVII se hace notar la influencia francesa, por ejemplo se
ataban a las rodillas con cinta adornada con una roseta.
Hoy en día se usa el término greguescos para nombrar la prenda llamada calzas: las que aparecen en los retratos reales. Pero con toda seguridad, y como bien dice la investigadora Carmen Bernis, son prendas distintas. A continuación pongo unos enlaces que nos pueden dar unas pistas:
En Poder de Ercilla a Pedro López, residente en Valencia, para que hiciese dar cumplimiento a una ejecutoria por la que se mandaba prender a Miguel de Nogueral, su paje, que se ausentó de su servicio llevándole, entre otras cosas, cuarenta y tres ejemplares de La Araucana. 14 de noviembre de 1579 hay referencia a unas calzas de terciopelo y unos gregüescos de damasco pardo.
En Oficio: Relojero (1591) se habla de unos «greguescos de cuero de benado sin aforro».
En la obra de Don Quijote, Cervantes llama a la misma prenda que lleva el caballero como calzón, greguescos y valones.
Los gregüescos, así como la valona francesa (que aparece a inicios del XVII), fueron prendas diferentes. Pero luego ambas se refirieron a cualquier tipo de calzón, llegando incluso a llamarse así a las calzas/muslos ya pasadas de moda.
Como vemos, Covarrubias, 1611, define a la valona como: "Un cierto género de zaragüelles o gregüescos, al uso de los valones, gente alemana del Ducado de Borgoña, balonotes. Y porque estos mesmos traen unos cuellos de camisas, extendidos y caídos sobre los hombros: llamaron en España balonas las que han empezado a usar de este modo."
1581.
Omnium pene Europeae, Asiae, Africae,
Americae Pentium habitus, Abraham de Bruyn,
Amberes (detalle)
1635.
Alonso Verdugado, Francisco Zurbarán, Dahlem Museum, Berlín (detalle)
Aquí vemos, de izquierda a derecha, primero un calzón
corto o zaragüelles (propio de villanos), luego unas calzas y por último los gregüescos (el futuro calzón de mediados del siglo XVII). Finales del XVI. Tapices de las “Guerras
del archiduque Alberto de Austria”, Palacio Real de Madrid (detalle) (imagen obtenida en ArteHistoria)
1631. Felipe IV, Diego Rodríguez de Silva y Velázquez, National Gallery, Londres (detalle)
La voz greguesco a finales del siglo XVII termina haciendo referencia a los calzones de los villanos (también fueron llamados bribiescos o breviescos). Por supuesto, apenas tiene que ver con los gregüescos de los cortesanos. Eran calzones que en muchos casos iban abiertos por abajo; algunos no pasaban de la rodilla y otros llegaban hasta los tobillos. A los más largos se les hacían cortes verticales en los bordes inferiores para poder ponérselos con más facilidad.
- Bernis Madrazo, Carmen: La moda en la España de Felipe II a través del retrato de corte. En el catálogo de la exposición Alonso Sánchez Coello y el retrato en la corte de Felipe II. Madrid: Museo del Prado. 1990.
- Bernis Madrazo, Carmen: El traje y los tipos sociales en el Quijote. Madrid: Visor, 2001.
- Soláns Soteras, María Concepción: La moda en la sociedad aragonesa del siglo XVI. Institución “Fernando el Católico” (C.S.I.C.). Colección Estudios. Zaragoza. 2009.